Tras las aglomeraciones en las fiestas de fundación de Quito, las autoridades ecuatorianas instan a la población a redoblar las medidas de bioseguridad para evitar un eventual repunte de la covid-19, así como, cumplir con la vacunación.
Catalina Yépez, epidemióloga y ex consejera de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), manifiesta que existe «un nivel de riesgo muy alto» de contagio por las aglomeraciones en festejos, en los que también se ha notado una ausencia casi total de normas de bioseguridad.
Lo sucedido en la capital de la república fue replicado en las redes sociales, donde se pudo evidenciar el desorden y peleas en calles del casco comercial de Quito, así como, en torno a la avenida Shyris, mismas que generaron alarma.
Las autoridades municipales no tardaron en rechazar ese tipo de incidentes y alegaron que esas reuniones no tenían los permisos respectivos.
Yépez recordó que cerca de un 78 % de la población de Quito, de más de 2,5 millones de habitantes, ya ha sido vacunada con la pauta completa, pero remarcó que hay una cuarta parte que aún no ha sido inmunizada y que puede ser blanco del virus.
Según la experta, se debería esperar unos quince días para observar la evolución de la situación epidemiológica, pero remarcó que es muy probable que se produzca un aumento de los contagios.
La experta manifestó que el riesgo aumentara si se llegase a detectar en el país a la variante ómicron, potencialmente más contagiosa.
Yépez sugirió a las autoridades reforzar los planes de comunicación sobre la covid-19, con el mensaje de que es necesario mantener «la guardia en alto», ya que «la pandemia no ha pasado» aún.