En sus últimos minutos de vida, la joven ecuatoriana que fue asesinada en Chicago, logró decir el nombre de su atacante: Alejandro Arellano, de 31 años de edad, quien era su ex pareja y la apuñaló repetidamente dentro de un tren. Samanta Maldonado de 26 años, había terminado recientemente con su pareja.
«La prueba clave en este caso la aportó la propia víctima», declaró Eric Carter, primer superintendente adjunto de la policía. «Ella nombró al agresor antes de morir por sus heridas».
A final de mes el acusado, Alejandro Arellano deberá comparecer ante la corte. El hecho quedó grabado por las cámaras del lugar. La reciente muerte de Maldonado, pone de nuevo sobre la mesa la importancia de hablar sobre este tipo de violencia. La organización Un Nuevo Despertar, con sedes en Chicago y Cícero, ofrece servicios de consejería, asesoría legal y grupos de apoyo a víctimas de este flagelo.