Tras 18 días de angustia, el pequeño Lyan José Hortúa fue liberado luego de que su familia decidiera pagar el rescate exigido por los secuestradores, ante lo que consideraron una falta de acción efectiva por parte del gobierno del presidente Gustavo Petro.
Angie Bonilla, madre del menor, compartió los duros momentos vividos y cómo fue el reencuentro con su hijo. “Tiene sus uñitas muy comiditas por la ansiedad… mi niño volvió a nacer y yo con él”, expresó entre lágrimas y alivio.
El niño fue mantenido en cautiverio en una zona montañosa de Jamundí, en el departamento del Valle del Cauca. Según la madre, el pequeño está asustado, pero a salvo, y ahora recibe atención médica y psicológica.
La familia agradeció a quienes ayudaron a visibilizar el caso y exigió mayor compromiso del Estado para combatir el secuestro, un delito que sigue golpeando a muchas regiones del país.